Recogiendo mi Nueva Caravancol

¡Buenas Caravancolers!
Hoy os vamos a contar la experiencia de reunirte por primera vez con tu nueva Caravancol, pero no vamos a ser nosotros, sino uno de nuestros clientes, Rubén, que acaba de recoger su minicaravana Caravancol el pasado 14 de Febrero.

EL comienzo de todo

Buenas a todos los futuros Caravancoleros, ya que me dirijo a vosotros principalmente, a aquellos que estéis pensando en Si comprar o No una minicaravana de Caravancol, os voy a contar mi experiencia que es desde cero, como sería vuestro caso, ya que los que ya tienen una CaravanCol, ya han vivido este momento y seguro que se verán reflejados en el.

Lo primero, presentarme , mi nombre es Rubén y soy totalmente nuevo en el mundo del caravaning y el camping. Mi situación es la siguiente, estoy casado y con un hijo de 4 años y tras la pandemia y el estar encerrados decidimos que debíamos salir más , no estar tanto en casa y nos acercamos a la Feria de Caravanas del IFEMA en Madrid el año pasado, ya que nos pareció una buena idea este mundillo del camping y el caravaning que tanto habíamos del que tanto y bien habíamos odio hablar.
Al llegar allí nos vimos abrumados por la variedad y porque no decirlo por los precios que se habían incrementado bastante de aquello que, previamente, habíamos mirado y nos surgieron mil dudas , donde la íbamos a guardar, seríamos capaces de conducirla, no nos entraría pereza luego el mover algo tan grande y otras mil cosillas que de un momento a otro se disiparon al ver el stand de Caravancol, la verdad que nos enamoramos de la minicaravana que allí tenían.
Ruth nos atendió todo lo bien y amablemente entre la multitud que tenía, la verdad, que nos fuimos con la idea en la cabeza pero con otras muchísimas dudas, tanto es así que al día siguiente volvimos a primera hora y ya con un poco menos de jaleo, Raúl nos atendió y resolvió todas nuestras dudas, tanto es así que al día siguiente quedamos con él y cerramos la compra.

La espera

La verdad que los 3 meses que, al final por circunstancias de nuestro trabajo para poder ir a buscarla han sido 4, se ha hecho un pelín larga, la verdad sea dicha. 
Pero a la vez, la ilusión de ir eligiendo primero los acabados, luego los vinilos para personalizarla…, ha echo del proceso, algo divertido.
Y por fin llegó el día, 14 de Febrero de 2023, no solo San Valentín, sino una fecha especial para nosotros porque fue el día en el que nos conocimos mi mujer y yo, así que fue doble ilusión.

El Viaje

Nosotros partimos desde Alovera (Guadalajara) y, pese a las fechas, tuvimos la suerte de pillar buen tiempo, casi 20 grados. Nada que ver con el frío y las nieves de la semana previa. 
Fuimos por la carretera de la Coruña, la A6 y luego la A66, (si bien es cierto que cogimos los 2 peajes de ambas autopistas que nos salió por unos 30 euros pero, la verdad, que para subir el puerto de Guadarrama y, sobre todo el de Pajares, merece muy mucho la pena pagarlos.
La sensación de nervios era evidente, esa mezcla de ansiedad, felicidad y preocupación porque todo estuviera bien, nos hizo que el viaje, que duró algo mas de 5 horas, se hiciera mucho más corto en nuestras cabezas y nos permitiera disfrutar del viaje y del paisaje nevado de Pajares.

Avilés

Una vez llegados a Avilés, la entrada por su carácter muy industrial defrauda un poco, pero teníamos el Hotel en el centro y eso era ya otra cosa.
Una ciudad con un estilo muy medieval en su casco histórico que merece mucho la pena conocer.
Nosotros nos alojamos en el Hotel Oca Villa de Avilés, bastante bien por su combinación de calidad, ubicación y precio, por si os sirve de referencia.
Lo primero que hicimos al llegar es ir a comer, Raúl de Caravancol nos había recomendado un restaurante, el Ronda 14, pero al ser lunes estaba cerrado, así que preguntamos por la zona y nos recomendaron el Casa Lin.
Tiene dos zonas, una interior muy chula y otra exterior en la zona de barra más tradicional.
Allí nos dirigimos y, para nuestra sorpresa y ser lunes a las 4 de la tarde, estaba lleno.
Así que tuvimos que esperar 15 minutos y comer en la zona del Bar, pero no nos arrepentimos lo más mínimo. (Si decidís ir, os aconsejamos que reservéis mesa).
Fabada, sidra escanciada al momento junto a la mesa y un arroz con leche, todo típico de Asturias.
Ya que vamos, ¡qué mejor que lo tradicional!

Posteriormente dimos un paseo por el centro para conocer Avilés y al hotel para prepararnos para el GRAN DÍA. Aquí os dejamos alguna fotillo.

el gran día, recogiendo nuestra caravancol

Por fin “el gran día” de recoger nuestra Caravancol había llegado.
Era martes, 14 de Febrero a las 10:00 de la mañana, teníamos que ir al otro lado de la ría, a las afueras de Avilés, como a unos 15 minutos desde el Hotel.
Y allí nos atendió Eduardo, que nos hizo entrega de la caravana y nos explicó muy amablemente todas las dudas que teníamos, sobre todo, el enganche y desenganche de la minicaravana ,el tema de la luz y la batería…
Del resto decir que, aunque nos lo explicó, entre los nervios y la emoción, casi que lo hemos aprendido con el uso en el viaje de vuelta. Además, nos acompañó detrás nuestra hasta salir del polígono para darnos seguridad, un detalle de agradecer, sin duda.
 
Como podeis ver mi coche es un Fiat, ya con bastantes años, y la lleva de sobra con freno de inercia.
Y como podéis ver en nuestras caras , se aprecia todo: la emoción, la felicidad, el cansancio, por supuesto, y las ganas y los nervios de iniciar el viaje de vuelta.

el viaje de vuelta y nuestras primeras sensaciones

El viaje de vuelta nos lo tomamos con mucha calma, sin prisas, disfrutando y aprendiendo a la vez de cómo llevar nuestra Caravancol.
Lo primero a lo que hay que adaptarse a las medidas, sobre todo al adelantar, puesto que llevamos un vehículo más largo.
Pero una vez que las tomas bien, no se diferencia en gran medida de llevar el coche solamente, excepto la marcha atrás, que es caso aparte.
Subimos Pajares que tiene unas grandes rampas, entre 4a y 5a, sin ningún tipo de problemas y al llegar a casa solo habíamos gastado un 20% más de gasoil, que no es mucho. 
La conducción, una vez que te quitas los nervios, es muy natural.
Eso sí, cuando paréis las primeras veces, os recomendamos que busquéis sitios donde no tengáis que hacer maniobras para aparcar, porque la marcha atrás del coche ahora, al ser un vehículo articulado, no es nada intuitiva y hay que practicarla.
Nosotros paramos donde se podía dejar bien y salir, tanto para repostar, que lo hicimos justo al acabar el puerto de Pajares dirección Madrid en la primera gasolinera que encuentras , es super amplia y luminosa y, demás, estaban muy pero que muy limpios los baños.
En caso de tener que dar marcha atrás, yo, como novato recomendaría desenganchar , girar la caravana a mano y luego volver a enganchar.
Evitareis muchos quebraderos de cabeza.
Una vez superado el viaje, llegaba la prueba final, bajar la rampa del garaje y desenganchar y aparcar la minciaravana.
Vivimos en un piso y la dejamos en garaje comunitario.
Pero, para nuestra sorpresa,  fue todo super rápido, la desenganchamos y colocamos en un abrir y cerrar de ojos.
En resumen, la primera experiencia, bastante mejor de lo esperado, de momento cumple con nuestras expectativas , ahora nos toca poner en práctica para la primera acampada, que si queréis estaremos encantados de compartirla también con vosotr@s.

Síguenos en nuestras Redes Sociales

×